Cuando dolor forma parte de tu normalidad, cuando todo parece perdido, cuando ya no sabes qué hacer de repente un día se cruza en tu camino una recomendación de un cirujano maxilofacial y una clínica dental a través de una página web especializada. Te quedas con el nombre, anotas el teléfono, te decides a llamar y logras encuentrar una solución para lo que ya dabas por perdido. Esto resume la historia de Susana una de nuestras pacientes a la que hemos podido ayudar con un trabajo conjunto de ortodoncia y cirugía maxilofacial.

La ortodoncia precoz, es la que nos permite hacer un seguimiento  del crecimiento  dental de los niños para poder ver posibles problemas y ponerles solución antes de que se produzcan. Con las revisiones periódicas de la boca y los dientes de los más pequeños de la casa podemos diagnosticar qué va a ocurrir en su crecimiento dental e intervenir a tiempo.

El crecimiento asimétrico es un problema muy habitual entre los niños que diagnosticado pronto tiene una rápida solución. Nos evitaremos un rosario de problemas funcionales y estéticos en la boca de mayores y en algunas ocasiones, una intervención quirúrgica. Poner solución a estos casos requiere de un tratamiento con dos objetivos el de la ortopedia dental y la estética facial.

Empezamos un nuevo año y con él una larga lista de propósitos para mejorar nuestra vida. En este artículo te proponemos que te ocupes de tu sonrisa o de la de los tuyos. Hay que dejar los miedos y las dudas atrás y apostar por la una buena salud buco dental. Los tratamientos de ortodoncia aportan grandes beneficios estéticos, funcionales y también emocionales. Y lo mejor de todo se pueden llevar a cabo tanto en niños, adolescentes como en adultos.

Neus, Inmanol, Alex … un año más la lista de pacientes que van a tomar la Primera Comunión es bien larga. Y un año más, muchos padres llegan angustiados a nuestra clínica de ortodoncia preguntando: “¿Sería posible quitarle a mi hijo los brackets unos días, nada uno o dos, para las fotos?”. A la angustia inicial y al mar de dudas, con el que vienen los padres a preguntar, se sucede el bienestar y el peso que les quitamos de encima cuando les respondemos: “¡Claro que se puede, sin problemas!”.